La Tercera

Grace, una esperanza para los que sufren de Parkinson

Poder eliminar el temblor de las manos producido por el mal de Parkinson, sin necesidad de fármacos ni operaciones, motivó a Felipe Nagel y un equipo a desarrollar un dispositivo biomédico que promete revolucionar la calidad de vida de estos pacientes y de los que sufren temblores esenciales.

Lo cierto es que para Felipe Nagel (en la foto), bioingeniero de la Universidad Adolfo Ibáñez, de 26 años, la razón que lo empujó a crear “Grace” fue familiar. En 2013, su padre empezó a mostrar los primeros síntomas de una enfermedad poco conocida, los temblores esenciales. “Mi padre comenzó con temblores en las manos, él es médico traumatólogo, y me dijo que creía que eran temblores esenciales. Levantamos información entre los dos, y cuando tuvimos una idea, generamos un producto de investigación y le presenté el proyecto a un profesor de mi Universidad, Cedric Little”, cuenta Nagel sobre el origen del nacimiento de “Grace”, en un equipo que también componen Federico Jensen, Álex Carimán y Pablo Prato.   

Después de haber probado, junto al equipo completo, su primera prueba de concepto y darse cuenta de que funcionaba, vieron en este dispositivo algo más que un simple experimento, sino que también un buen negocio. Y partieron un emprendimiento. Contactaron a algunos inversores privados, recibieron ayuda de Corfo y finalmente comenzaron el camino. Eso fue hace unos cinco años.

Su creador dice que entrar a un emprendimiento ha sido un camino difícil, de momentos bueno y malos, con altos y bajos, “pero siempre trabajando con la idea de que se está haciendo algo que mejora la vida de muchos” y que el resultado solo trae resultados positivos.

“Grace” es un dispositivo es pequeño, un strap, algo similar a una correa, que va amarrada al brazo, de la cual salen dos electrodos, los que se conectan a las zonas más afectadas por la patología (cuello, mano, antebrazos, etcétera). Hoy, el porte es similar al de un iPhone 6, un poco más liviano, pero a corto plazo están buscando la fórmula para que sea más pequeño. Felipe Nagel dice que es importante advertir que “Grace” no es de uso continuo, “la idea es que el paciente pueda discernir cuándo encenderlo, cuándo usarlo”, aclara, para su correcto funcionamiento. 

Temblores diferentes 

Aunque en un principio “Grace” está pensado específicamente para pacientes con temblores esenciales, hay buenos resultados en enfermos con Parkinson. Felipe Nagel explica que ambos temblores son muy distintos y es importante diferenciarlos. El temblor, en el caso del Parkinson, es en reposo. “El otro, es un temblor postural, kinético y de acción”, detalla Nagel y especifica: “Si una persona intenta tomar un vaso de agua, lo levanta y lo mantiene contra la gravedad, comenzará a temblar.  Y se le denomina esencial, porque no se sabe cuál es la causa”. 

Actualmente en Chile no existen estudios actualizados y específicos acerca de la extensión de estas enfermedades, pero de acuerdo a cifras que se manejan, un 0,4% de la población padece esta enfermedad. Hoy, Felipe Nagel trabaja junto al Centro de Trastorno del Movimiento y, a pesar de que aún no tienen un número específico de afectados, las estimaciones apuntan a que 1 de cada 5 personas sobre 55 años padece algún tipo de temblor esencial en el país. 

Los resultados de la aplicación de este dispositivo biomédico han sido muy exitosos. Las pruebas realizadas han sido menos en pacientes con Parkinson que en pacientes con temblores esenciales, pero el porcentaje de reducción de los movimientos en los que padecen Párkinson es de un 70% y en aumento. En el caso de los pacientes con temblores esenciales que, como acentúa Felipe Nagel, son su principal foco de estudio, los resultados son mucho más prometedores: “Hay casos en que las personas dejan de temblar en un 100%”.

En el nombre del padre

“Grace” está hoy en etapa de consolidación, cuenta Felipe Nagel. Tienen un prototipo funcional, además de ser una marca patentada en Estados Unidos y Europa, mientras que en Chile trabajan en un proceso de validación, con distintas organizaciones médicas, buscando pruebas clínicas que avalen el desarrollo.

“Estamos haciendo pruebas médicas, necesitamos una validación acá en Chile y para eso trabajando con centros de trastornos de movimiento.  Estamos realizando nuestra primera iteración de pruebas médicas, para comprobar la eficacia y la seguridad de nuestro dispositivo”, apunta Felipe Negel. Sus exitosos resultados los ha llevado hoy a entrar en una etapa más comercial del emprendimiento, donde han debido regularse, para entrar a Estados Unidos, con lo que finalmente buscan masificarse a nivel mundial. 

“Queremos primero tener todas las regulaciones y aprobaciones para poder vender el producto. Nuestro merado principal es el americano porque la incidencia del temblor esencial es mayor en Estados Unidos”, dice Negel. “La patente allá les permite tener una amplia gama de países donde poder trabajar con la propiedad intelectual del mismo Estados Unidos”, añade. Luego agrega que la idea es empezar allá para después volver a Chile y después expandirse por todo el mundo. 

El objetivo de los creadores es que a fines de este año o a principios de 2020, “Grace” llegue al mercado con un valor cercano a los US$1.000, “similar al precio de un smartphone y un 300% más barato que una operación”, compara Negel. 

Hace unos años atrás Google lanzó una cuchara para personas con Parkinson que los ayudaba a estabilizar los movimientos al momento de comer. Sin embargo, Felipe Negel asegura que un dispositivo como “Grace” no se encuentra en el mercado. “No hay nada parecido que compita directamente con este dispositivo biomédico”, asegura con orgullo. Su padre ha sido el gran conejillo de indias: “Ver a mi padre sin temblar, cuando toma un vaso o cuando estamos comiendo, es lo que me motiva a seguir cada día”.