Durante años, Carahue ha querido revivir su gran historia fluvial. Hoy ese deseo se hace realidad gracias al proyecto Carahue navegable.
La aventura empieza en la estación fluvial. Desde ahí, comienza un recorrido de 30 kilómetros que ocurre tanto dentro como fuera del río.
Los primeros en navegar las aguas del Imperial fueron los mapuches. Hoy los turistas pueden ver flora y fauna nativa, y en la Isla Doña Inés, que es la única isla habitada en el río, se pueden avistar más de 30 tipos de aves.
Los humedales de Monkul son la última parada. Este es un ecosistema estuario formado por lagunas, marismas de pastos altos y pajonales ribereños, que alberga 171 especies de plantas, incluyendo especies endémicas como el mañío de hojas largas. Esta semana, la Convención sobre los Humedales lo declaró como Sitio Ramsar. Es decir, de importancia internacional. Así los humedales de Monkul se convierten en los primeros en obtener esta categoría en la Región de La Araucanía y el tercero en el sur de Chile.
Para conocer más acerca de las distintas opciones de servicios turísticos que ofrece la Ruta Fluvial: Carahue Navegable se puede visitar su página en Facebook, visitar la Estación Fluvial ubicada en calle Alessandri 700 en Carahue (abierto de martes a domingo), o bien escribir al correo: carahuenavegable@gmail.com